El gobierno de Perú se posiciona en la vanguardia de América Latina, con la incorporación de Inteligencia Artificial en el Poder Judicial. Con este paso, que lo distingue de otros países de la región, no sólo está adoptando Inteligencia Artificial, sino que la regula, la aplica y la discute desde un enfoque humanista y responsable.
Perú y su liderazgo normativo en IA
Desde julio de 2023, Perú cuenta con la Ley N.º 31814, primera norma en América Latina que regula el desarrollo, implementación y uso ético de la Inteligencia Artificial en el país.
Promulgada por el Congreso y liderada por la Comisión de Ciencia, Innovación y Tecnología, esta ley establece principios como la protección de derechos fundamentales, la transparencia algorítmica y la supervisión humana obligatoria en todo sistema automatizado.
La ley establece un marco para que la IA sea aplicada con fines que beneficien al ciudadano, fomente la innovación responsable y evite el uso discriminatorio o sesgado de estas tecnologías. Este enfoque es especialmente relevante ante la aparición de IAs autónomas como Manus, de origen chino pero vigente en Perú, que operan sin intervención humana y por lo tanto requieren controles normativos más robustos y dinámicos.
«Perú es el único país de la región con una legislación específica sobre IA», determinó la exjueza colombiana Clara Dueñas Quevedo, y subrayó que esta regulación promueve «el uso transparente, responsable y con enfoque social» de la Inteligencia Artificial.
Curia: Inteligencia Artificial al servicio del Poder Judicial
La aplicación concreta de la IA en Perú se visibiliza en uno de los sectores más delicados del Estado: la justicia. Desde el año 2023 la Corte Suprema implementa Curia, un asistente virtual de inteligencia artificial diseñado para agilizar la redacción de resoluciones judiciales.
Esta iniciativa la impulsó la presidenta del Poder Judicial, Janet Tello Gilardi, quien defendió su implementación como un modo de reducir tiempos procesales sin sustituir el criterio jurídico humano.
Curia permite analizar jurisprudencia, sugerir líneas argumentativas y automatizar formatos procesales, recayendo la decisión final en el magistrado o magistrada, según establece el reglamento interno de implementación.
Los observadores internacionales valoraron este método como una integración ética y funcional de la IA en procesos sensibles, en contraste con modelos que delegan decisiones sin supervisión.
Actualmente, el Poder Judicial evalua la incorporación de la IA autónoma Manus aunque podría generar disrupciones en los actuales marcos regulatorios respecto a la Inteligencia Artificial. Para evitar dicho inconveniente, Perú comenzó a trazar una Agenda Nacional de Gobernanza Digital, cuyo borrador está a cargo de la Secretaría de Gobierno y Transformación Digital con apoyo del BID y la ONU.
Esta agenda articula políticas en alfabetización digital, justicia digital, innovación pública y protección de datos, y contempla la creación de un Observatorio Nacional de Inteligencia Artificial, que tendrá como objetivo medir impactos, evaluar riesgos y generar estándares éticos para su uso.