Telegram ha anunciado que su función de billetera digital estará temporalmente restringida para los usuarios en el Reino Unido, debido a una reestructuración corporativa. Según un comunicado emitido el 25 de septiembre, la compañía planea registrarse como proveedor de criptoactivos ante la Autoridad de Conducta Financiera (FCA, por sus siglas en inglés) antes de reactivar la billetera.
Este movimiento es parte del esfuerzo de Telegram por cumplir con las normativas financieras vigentes en el Reino Unido. Hasta que la empresa obtenga las licencias regulatorias necesarias, los residentes del país no podrán utilizar las funciones de la billetera dentro de la aplicación. No obstante, durante este período, los usuarios podrán retirar fondos a billeteras externas sin cargos adicionales.
Telegram en medio de una tormenta regulatoria
El bloqueo de la billetera en el Reino Unido es solo una de las recientes medidas que Telegram ha tomado para cumplir con las crecientes presiones regulatorias. Días antes, la plataforma de mensajería anunció un cambio significativo en sus políticas de privacidad. Telegram ahora compartirá datos de los usuarios con las autoridades, siempre que se presenten solicitudes legales válidas. Estos datos incluyen números de teléfono y direcciones IP, lo que ha generado alarma entre activistas de privacidad y derechos digitales.
Pavel Durov, fundador de Telegram, defendió la medida afirmando que ayudará a prevenir actividades delictivas en la plataforma. En su mensaje a la comunidad, Durov señaló que Telegram “no permitirá que malos actores pongan en riesgo a los casi mil millones de usuarios” de la aplicación.
Además de estas medidas, Telegram deshabilitó la función de geolocalización personal, que será reemplazada por una opción de “negocios cercanos”, y eliminó la herramienta de blogs “Telegraph”. Durov justificó esta última decisión argumentando que, aunque solo una fracción mínima de usuarios abusaba de la herramienta para compartir contenido ilícito, el riesgo para la comunidad era inaceptable.
¿Qué sigue para Telegram?
Con millones de usuarios afectados por estos cambios, Telegram sigue en la mira de las autoridades financieras y reguladoras en varias partes del mundo. El futuro de la plataforma depende ahora de su capacidad para adaptarse rápidamente a estas exigencias, mientras intenta mantener la confianza de su vasta base de usuarios, que valora la privacidad y la libertad de expresión que la aplicación promete.
A medida que la empresa busca el registro como proveedor de criptoactivos en el Reino Unido, los usuarios esperan ansiosos la reactivación de la billetera digital, aunque el proceso podría tomar más tiempo de lo esperado. En un mercado cada vez más competitivo y regulado, Telegram se enfrenta al desafío de mantener su liderazgo sin comprometer los principios que la llevaron al éxito.
