El gobierno colombiano presentó ante el Congreso de la República un proyecto de reforma fiscal para recaudar fondos para el presupuesto del año 2026. El ejecutivo buscará aprobar el proyecto, a los fines de mermar el deterioro de las cuentas y recuperar USD 6.544 millones.
En el documento presentado por el Gobierno se incluye cláusulas especiales que involucran el comercio de criptomonedas a través de exchanges y plataformas especializadas, fijando impuestos sobre estas operaciones a la luz de la relevancia que ha ganado este mercado en estos últimos tiempos.
¿En qué consiste la reforma tributaria?
De acuerdo con información compartida por un medio de Colombia, la nueva reforma tributaria propone que el comercio de Bitcoin y criptomonedas sea tratado como la «compra de activos fuera del país».
Por lo tanto, según lo que establece la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacional (DIAN), dichas compras deben presentarse en la declaración correspondiente «cuando dichos bienes excedan las 2.000 UVT al 1 de enero de cada año», al menos para las reglas aplicables para 2025.
Originalmente, para las reglas fiscales aplicables para 2025, la mayoría de los activos adquiridos fuera del país «no tienen un impuesto directo específico».
Sin embargo, con esta la nueva propuesta se establece una nueva categoría denominada «activos digitales», donde se hará un cálculo de las operaciones comerciales que los usuarios hagan operando con criptomonedas a través de exchanges y plataformas especializadas.
Otro aspecto que también podría tocar las operaciones con criptomonedas tienen que ver con el impuesto al patrimonio aplicable para los colombianos con mayor riqueza. De ahora en adelante, la tributación para estas personas aplicará si el patrimonio excede los COP 1.991 millones, con lo cual aplicará para el impuesto sobre la renta, entendiendo también que las criptomonedas aplican como activos para estos fines.
Por último, otra base que podría bien aplicar sobre las criptomonedas tiene que ver al impuesto aplicable sobre los dividendos. Este pasará del 20% al 30% para activos que deriven ganancias de este tipo, aunque de momento se desconoce si aplicarán algunas salvedades o exenciones dada la naturaleza volátil del mercado de las monedas digitales.
Los argumentos del gobierno colombiano
Tras conocerse la nueva iniciativa, el Ministro de Hacienda, Germán Ávila, explicó que la propuesta busca garantizar no solo la financiación del 2026, sino también la estabilidad macroeconómica de Colombia en los años siguientes.
Sin embargo, la reforma enfrenta un escenario político complejo. Según la economista de Scotiabank, Jackeline Piraján, la propuesta tiene «baja chance» de ser aprobada, ya que no está acompañada de medidas de disciplina en el gasto público. La cercanía de las elecciones y la fragmentación en el Congreso dificultan aún más el consenso.
Cabe destacar que el aumento de las necesidades de financiamiento en Colombia convierten esta reforma en un punto de inflexión para la política fiscal del país. Su aprobación o rechazo tendrá un impacto decisivo en la estabilidad económica y política de Colombia en los próximos años.