Después de dos meses consecutivos de caídas, Solana (SOL) cerró abril con una recuperación notable. El precio de la criptomoneda aumentó más de un 15% en el mes, terminando por encima de los 140 dólares (aproximadamente 130 euros).
Cabe destacar que, durante abril, SOL llegó a cotizar por debajo de los 100 dólares (unos 93 euros), un nivel que no se veía desde febrero de 2024.
A pesar de la presión vendedora, el activo mostró resiliencia y logró mantenerse entre los diez mayores criptoactivos por capitalización de mercado. Esto ha llevado a muchos a preguntarse si Solana finalmente ha retomado su camino de crecimiento.
El gráfico mensual sugiere que Solana podría haber completado su ciclo correctivo a largo plazo, iniciado tras alcanzar su máximo histórico de 296 dólares (aproximadamente 275 euros) en enero.
Según la herramienta de retroceso de Fibonacci, SOL se sostuvo en el nivel 0,618, un soporte clave para posibles reversiones de tendencia. La extensión de Fibonacci proyecta un nuevo objetivo en los 369 dólares (unos 342 euros). De cumplirse este escenario, Solana podría subir alrededor de un 150% respecto al precio actual.
En el gráfico semanal, se observa que SOL ha iniciado un repunte correctivo y ya ha superado el nivel 0,236. El próximo punto de resistencia está en 172 dólares (aproximadamente 160 euros). Superar ese nivel podría confirmar una nueva fase alcista.
En caso de continuar este impulso, Solana podría alcanzar la “zona dorada” entre los niveles 0,5 y 0,618, lo que abriría la puerta a una subida hasta los 221 dólares (unos 205 euros), equivalente a una ganancia del 50% en el corto plazo.
Desde el punto de vista técnico, el panorama diario es ligeramente optimista. El RSI se encuentra por encima de 50 y en ascenso, mientras que el MACD emite una señal de compra, aunque con barras decrecientes en su histograma.
Por otro lado, el ADX está por debajo de 20, indicando debilidad en la tendencia actual. Aun así, el CMF se mantiene en positivo, lo cual refleja entrada de capital en el activo.
En cuanto a datos on-chain, la red Solana procesó cerca de 100 millones de transacciones en abril, lo que representa un crecimiento del 12% respecto a marzo, según datos de Artemis. Este incremento sugiere una mayor adopción del protocolo, en especial por parte de instituciones.
Además, el mercado aguarda con expectativa una posible aprobación por parte de la SEC de ETFs basados en SOL. Si esto ocurre, podría actuar como un catalizador importante para una nueva ola de valorización en las próximas semanas.
A la par del renovado interés por Solana, un nuevo proyecto ha empezado a destacar: Solaxy (SOLX). Desarrollado exclusivamente para esta red, Solaxy ofrece una solución basada en rollups optimizados que busca elevar la capacidad de Solana a más de 10.000 transacciones por segundo.
Esta tecnología pretende eliminar los cuellos de botella durante picos de uso, posicionando a Solana como un referente en escalabilidad.
El interés por el proyecto es evidente: la preventa del token SOLX ya ha recaudado más de 30 millones de dólares (aproximadamente 28 millones de euros). Esto demuestra la confianza del mercado en soluciones que puedan sostener el crecimiento de la red ante un posible aumento de la demanda institucional.