El gobierno de Donald Trump sufrió un duro golpe el jueves (8), ya que miembros del partido demócrata, oposición al gobierno, se unieron para bloquear el avance de la Ley de Stablecoins, el principal proyecto cripto de Trump.
Denominado Ley GENIUS, el proyecto cripto que busca digitalizar el dólar y asegurar la hegemonía de la moneda estadounidense en medio de la revolución de las finanzas descentralizadas podría estar llegando a su fin. Una moción procesal, que determinaría si el proyecto sería o no enviado para su votación en el pleno del Senado, fue rechazada por los demócratas.
El proyecto, que había sido aprobado en el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes a principios de abril, esperaba ser votado en el pleno. Sin embargo, para ello era necesario presentar una moción procesal y que ésta fuera aprobada con al menos 60 votos. A pesar de obtener mayoría (54 de las 100 sillas), el partido de Trump solo logró 49 votos.
Así, la administración Trump sufre su primera gran derrota en el Senado (Cámara Alta de EE. UU.) respecto a su política pro-cripto. El presidente, elegido con la promesa de convertir a EE. UU. en la capital de los activos digitales, ha fallado en cumplir estas promesas.
La nueva administración Trump consideraba la Ley Genius como su principal carta para el primer semestre de gobierno. El gobierno nombró a David Sacks, conocido como el «zar de las criptomonedas», para liderar las negociaciones de aprobación.
El objetivo principal era obtener el apoyo de ambas partes para el proyecto, tanto de republicanos como de demócratas. De esta manera, la ley de stablecoins sobreviviría incluso en caso de un regreso de los demócratas a la Casa Blanca en las elecciones de 2028.
Sin embargo, ninguno de los demócratas apoyó la versión actual del proyecto de ley de las stablecoins y votaron en conjunto contra la moción. Se unieron a los demócratas tres republicanos, entre ellos Rand Paul, de Kentucky, y Josh Hawley, de Missouri, según informó Politico.
Ni siquiera las duras amenazas hechas por los republicanos frenaron el ímpetu de los demócratas para bloquear el proyecto. En las horas previas a la derrota de Trump, los aliados del presidente advirtieron que, si los demócratas no apoyaban el envío del proyecto al pleno, las empresas de criptomonedas retirarían su apoyo financiero a los políticos en las próximas elecciones.
Incluso uno de los nombres más fuertes de la industria cripto en el gobierno de Trump, Bo Hines, se sumó a las amenazas. En la tarde del jueves (8), horas antes de la votación de la moción, el director ejecutivo del Grupo de Trabajo del Presidente sobre Activos Digitales publicó en su cuenta de X:
«Los demócratas tienen una decisión sencilla que tomar hoy. A favor de la innovación. O en contra de la innovación. Tenemos la oportunidad de inaugurar la era dorada de los activos digitales y consolidar la posición de los Estados Unidos como la capital mundial de las criptomonedas. Elijan sabiamente.»
Con la negativa, los demócratas demostraron que para que la agenda cripto de Trump avance en el Senado, es necesario abrir el diálogo. Entre los puntos cuestionados por el grupo se encuentran las reglas sobre emisores extranjeros y la lucha contra el lavado de dinero. Desde la perspectiva de los demócratas, el proyecto es demasiado permisivo en estos dos puntos.
Además, acusan a Donald Trump de utilizar su cargo para beneficiar sus negocios privados, incluidos los relacionados con las criptomonedas. Recientemente, el equipo detrás de la namecoin TRUMP anunció una campaña de cena con Donald Trump.