El Servicio Secreto de Estados Unidos, en colaboración con las autoridades de Canadá, logró desmantelar una importante estafa de phishing vinculada al ecosistema de criptomonedas, específicamente en la red de Ethereum (ETH). Este esquema operaba en ambos países y ocasionó pérdidas por más de 4,3 millones de dólares (unos 4 millones de euros).
La operación, denominada “Operación Avalanche”, se centró en usuarios de Ethereum que fueron víctimas de un método conocido como phishing de aprobación, una modalidad de fraude en la que los estafadores obtienen acceso no autorizado a monederos digitales a través de supuestas solicitudes legítimas de permisos.
Según el comunicado de prensa oficial, el Servicio Secreto trabajó conjuntamente con múltiples agencias canadienses, incluyendo la Comisión de Valores de Columbia Británica (BCSC), para combatir el fraude.
Además, al menos seis empresas están siendo investigadas por su posible vinculación con el esquema fraudulento, ya que habrían sido utilizadas por los delincuentes para canalizar operaciones.
- Lee también: Proyecto de NFTs anuncia el fin de la investigación de la SEC y lanza rebranding con nueva dirección
Cooperación internacional para frenar el fraude
La operación se enfocó en detectar monederos comprometidos en la red de Ethereum, notificar a los usuarios afectados y minimizar el riesgo de pérdidas futuras.
“La operación reunió a varias entidades de Estados Unidos y Canadá para proteger a los usuarios frente a actividades fraudulentas con criptomonedas”, afirmó Matt McCool, agente especial del Servicio Secreto.
La coordinación fue clave ante el aumento de amenazas relacionadas con estafas en el ecosistema cripto, como ha ocurrido también recientemente en países como India.
En este caso, los estafadores emplearon la técnica de phishing de aprobación, en la que las víctimas son inducidas a autorizar transacciones fraudulentas. A menudo, los delincuentes se hacen pasar por aplicaciones conocidas e introducen malware para obtener el control de los fondos.
Muchas personas, sin saberlo, concedieron acceso a sus activos digitales al hacer clic en enlaces engañosos o autorizar solicitudes maliciosas. Una vez dentro, los hackers vaciaron sus monederos.
Durante la operación, las autoridades lograron identificar a las víctimas e informarlas sobre las amenazas, recomendando acciones para proteger sus fondos. Aun así, los criminales lograron sustraer más de 4,3 millones de dólares en ETH.
Mayor vigilancia en EE. UU. ante estafas cripto
El éxito de la Operación Avalanche pone de manifiesto la creciente necesidad de cooperación internacional para hacer frente al fraude con criptoactivos. A medida que este mercado se expande, también lo hacen las amenazas.
En paralelo a este caso, otro incidente de seguridad relacionado con el token ZK provocó la pérdida de 5 millones de dólares (aproximadamente 4,65 millones de euros) en una cuenta de administrador.
Ante estos hechos, el Servicio Secreto ha intensificado sus esfuerzos para proteger a los usuarios, combinando tecnología avanzada y cooperación entre países para reducir los delitos vinculados al ecosistema cripto.
Recientemente, las autoridades estadounidenses también intentaron desactivar varios dominios asociados a una casa de cambio rusa y bloquear activos relacionados con operaciones ilegales.
