Las autoridades policiales de Malasia arrestaron a siete personas por sospechas de operar minería de Bitcoin (BTC) que implicaba el robo de electricidad. Según el diario local Bernama, entre los detenidos había tres ciudadanos malasios y cuatro extranjeros, que están en cárceles separadas.
Wan Kamarul Azran Wan Yusof, jefe de la policía del distrito de Sepang, mencionó que los individuos arrestados no tenían antecedentes criminales.
La policía local también confiscó 52 plataformas de minería y otros dispositivos electrónicos, con un valor de 250.000 ringgits malasios. Es decir, aproximadamente 57.000 dólares estadounidenses según el tipo de cambio actual.
En Malasia, algunos mineros están buscando agresivamente encontrar energía gratuita para minar BTC. Sin embargo, el robo de electricidad conlleva penas severas en el país. Según lo definido por la Sección 33(5) de la Ordenanza de Electricidad, la práctica tiene sanciones que pueden variar desde una multa de hasta 100.000 ringgit y/o una pena máxima de prisión de cinco años.
El mes pasado, Sarawak Energy, la empresa estatal de suministro eléctrico en Malasia, acusó a los mineros de criptomonedas de robar repetidamente electricidad para sus plataformas.
Sarawak se unió a la policía local para una operación conjunta y descubrió que dos operaciones de minería eran sospechosas de robar 30.000 ringgit, valorados en 6.500 dólares, en electricidad cada mes. También sugirieron que ambas operaciones estaban conectadas y controladas por la misma entidad.
Como parte de la investigación, se incautaron 120 máquinas y varios dispositivos electrónicos. Sin embargo, esto no fue suficiente para disuadir a los mineros clandestinos de seguir buscando energía barata.
Las actividades con criptomonedas, incluida la minería, no están prohibidas en Malasia. Pero un informe mostró que la principal causa del robo significativo de electricidad en el país entre 2018 y 2023 fue la minería clandestina. Durante ese período, las pérdidas ascendieron a 3.400 millones de ringgit, o casi 723 millones de dólares, debido al uso no autorizado de electricidad.
La crisis del robo de electricidad para minar Bitcoin se ha extendido al otro lado de la frontera, en Tailandia, donde las autoridades enfrentan un desafío similar con el robo de electricidad vinculado a la minería de criptomonedas.
En investigaciones anteriores, la Autoridad Metropolitana de Electricidad (MEA, por sus siglas en inglés) encontró varios edificios comerciales que parecían abandonados, pero mostraban signos de minería de Bitcoin, como ventiladores ruidosos constantes, entradas selladas y sistemas de refrigeración activados las 24 horas.
Para incentivar la denuncia pública, las autoridades prometieron mantener toda la información confidencial y ofrecieron varias maneras para que los ciudadanos reporten sospechas de uso ilegal de electricidad para la minería de Bitcoin.