El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha modificado su enfoque respecto a la controvertida ley Bitcoin de El Salvador. En lugar de exigir su derogación, como lo hizo anteriormente, el FMI ahora solicita que el país reduzca el alcance de esta legislación. Este cambio podría abrir la puerta a un acuerdo que permita a El Salvador acceder a $1,300 millones en financiamiento. Así lo anunció la directora del Departamento de Comunicaciones del FMI, Julie Kozack, durante una reciente conferencia de prensa.
Kozack enfatizó que el FMI recomienda “fortalecer el marco regulatorio y la supervisión del ecosistema Bitcoin”, al tiempo que busca “reducir la exposición del sector público al bitcoin”. Este ajuste en la postura del FMI marca un cambio significativo, ya que en 2021 había instado a la eliminación total de la ley que convierte al bitcoin en moneda de curso legal.
Consecuencias potenciales para el presupuesto nacional
A pesar de estas recomendaciones, el presidente Nayib Bukele anunció que el presupuesto nacional de 2025 no incluirá la emisión de nueva deuda. Esto sugiere que el Gobierno podría estar resignándose a no recibir el apoyo del FMI. No obstante, la falta de un acuerdo tendría implicaciones graves: la tasa de interés de los $1,000 millones en bonos del país podría aumentar de 12% a 16%, encareciendo aún más la deuda.
Desde 2021, El Salvador ha explorado la emisión de bonos vinculados al Bitcoin, conocidos como Bonos Volcán. Sin embargo, hasta la fecha, esta promesa no se ha concretado. La última comunicación oficial sobre estos bonos se remonta a diciembre de 2023, cuando la Oficina Nacional de Bitcoin (ONBTC) anunció que el lanzamiento estaba próximo, habiendo obtenido la aprobación de las autoridades.
Dudas en el mercado sobre los Bonos Volcán
El economista Teo Sepúlveda, de South Texas College, expresó su escepticismo sobre la viabilidad de los Bonos Volcán. Según él, el elevado interés de los bonos tradicionales del Gobierno, que alcanzan el 12%, hace que la oferta de deuda asociada al Bitcoin sea poco atractiva. “Para que el Bono Bitcoin pueda ser atractivo debería tener unos intereses altísimos, mayores que el de los bonos emitidos este año”, señaló Sepúlveda.
Bukele, por su parte, asegura que El Salvador tiene un tesoro en Bitcoin que supera los $370 millones. Sin embargo, no existen datos verificables que respalden esta afirmación, lo que añade un velo de incertidumbre sobre la situación financiera del país en el contexto del criptoactivo. En un momento en que la economía salvadoreña enfrenta desafíos significativos, el futuro del Bitcoin en el país sigue siendo incierto.