La Fundación Ethereum ha anunciado un ambicioso proyecto denominado «Iniciativa de Seguridad de 1 Trillion de Dólares» (Trillion Dollar Security Initiative). El objetivo de esta iniciativa es mejorar la seguridad del sistema Ethereum con el apoyo de la comunidad, convirtiendo el protocolo en un «bóveda» invulnerable capaz de soportar billones en valor económico, sin comprometer estos activos.
Esta iniciativa surge en un momento clave, cuando grandes instituciones financieras y gobiernos están acelerando sus experimentos con la tecnología blockchain. El sistema SWIFT, que sigue dominando las transacciones internacionales, está siendo cuestionado debido a los esfuerzos de varios países por crear sus propias monedas digitales de banco central (CBDC).
Además, bancos y empresas están aumentando sus inversiones en soluciones basadas en blockchain para realizar liquidaciones más rápidas y económicas, operando las 24 horas del día, todos los días de la semana.
Un plan ambicioso para Ethereum
Sin embargo, la seguridad sigue siendo el talón de Aquiles de las blockchains, incluida Ethereum. El año pasado, alrededor del 51% de todos los ataques cibernéticos registrados tuvieron como objetivo la red Ethereum.
Los hackers robaron 1.5 mil millones de dólares en Ethereum de la plataforma de intercambio Bybit, uno de los delitos más grandes en la historia de las criptomonedas. Aunque la red en sí no falló, ataques como este dañan la reputación de un protocolo que aspira a convertirse en el nuevo SWIFT digital.
Es precisamente para superar estas debilidades que surge la «Iniciativa de Seguridad de 1 Trillion de Dólares» como una estrategia ambiciosa. Su objetivo es transformar Ethereum en una red tan robusta que miles de millones de personas puedan almacenar sus economías en «dólares digitales» con total confianza. Además, busca proporcionar la seguridad necesaria para que gobiernos y corporaciones depositen billones de dólares en presupuestos y tesorerías a través de contratos inteligentes.
Nombres y estrategia de Ethereum
El proyecto estará bajo la dirección de Fredrik Svantes, líder de la división de seguridad del protocolo, y Josh Stak, miembro del equipo de gestión de la Fundación Ethereum.
Cuentan con el apoyo de tres asesores: samczsun (fundador de Security Alliance, agencia especializada en soluciones de seguridad para proyectos de criptomonedas); Mehdi Zerouali (de Sigma Prime, empresa especializada en seguridad en blockchain) y Zach Obront (cofundador de Etherealize, enfocado en productos para migrar las finanzas tradicionales a Ethereum).
El equipo liderará el proyecto en tres fases decisivas. En la primera fase, mapearán detalladamente todos los puntos fuertes y vulnerabilidades de la arquitectura de Ethereum, desde la experiencia de usuario (con énfasis en la firma ciega y seguridad en el front-end) hasta la protección de carteras, contratos inteligentes, infraestructura y protocolo, elaborando un informe estratégico para guiar las acciones prioritarias.
En la segunda fase, implementarán mejoras concretas, combinando correcciones urgentes con inversiones en soluciones sostenibles para el futuro. Finalmente, en la tercera fase, establecerán un sistema de comunicación transparente sobre seguridad, permitiendo a cualquier usuario evaluar y comparar los estándares de protección de Ethereum con otras redes blockchain y sistemas financieros convencionales.