American Bitcoin, una compañía de minería de BTC respaldada por los hijos del expresidente Donald Trump, comenzó a cotizar públicamente este miércoles 3 de septiembre en la bolsa Nasdaq bajo el ticker ABTC.
El debut estuvo marcado por un fuerte interés del mercado. Las acciones abrieron con una subida del 6,19%, negociándose a 2,56 dólares en la apertura, lo que fue interpretado como una señal positiva para la entrada de la empresa en el mercado público.
La empresa es una joint venture entre Eric Trump, Donald Trump Jr. y Hut 8, una compañía consolidada en minería de Bitcoin. Para crear la nueva firma, Hut 8 aportó la gran mayoría de sus equipos de minería (ASICs) a cambio del 80% de las acciones de American Bitcoin. A partir de ahora, Hut 8 planea centrar sus esfuerzos restantes en el desarrollo de su negocio de centros de datos para inteligencia artificial.
Con el fin de acelerar la salida a bolsa, los Trump y Hut 8 acordaron una fusión total mediante acciones con Gryphon Digital Mining, otra empresa del sector. Como parte de la operación, American Bitcoin también emitió acciones de forma privada para recaudar 220 millones de dólares.
Eric Trump describió públicamente la compañía como una forma para que los inversores tengan exposición directa al precio de Bitcoin, llegando a calificarla como un “proxy de Bitcoin”.
Conglomerado cripto
La salida a Nasdaq de ABTC es solo una pieza de un rompecabezas mucho mayor. El ecosistema cripto de la familia Trump se está transformando en un auténtico imperio. Entre sus negocios destacan: una criptomoneda propia, una stablecoin (USD1), la memecoin TRUMP y colecciones de NFTs. Además, cuentan con varias empresas que cotizan en bolsa y preparan una futura aplicación de préstamos en criptomonedas.
En cuanto a los resultados, las cifras han sido millonarias. El lunes pasado, el lanzamiento del token de World Liberty Financial, otro proyecto respaldado por los hijos de Trump, generó aproximadamente 6.000 millones de dólares.
A ello se suman un acuerdo de tesorería por 1.500 millones de dólares y otro convenio reciente de 6.400 millones de dólares entre la plataforma Crypto.com y la empresa de medios de la familia Trump. Esta última, incluso, anunció planes para crear una reserva de 2.000 millones de dólares en Bitcoin.
Este crecimiento acelerado ha encendido “señales de alarma” entre críticos y políticos demócratas, quienes sostienen que estos negocios pueden servir como vehículo para que intereses ocultos influyan o beneficien económicamente al presidente de Estados Unidos. Sin embargo, Eric Trump ha rechazado con firmeza estas acusaciones, asegurando que no discute sus negocios con su padre.
La entrada en Nasdaq coloca a las iniciativas de la familia bajo la lupa del mercado y de los reguladores. De esta forma, comienza ahora un nuevo —y posiblemente polémico— capítulo en la intersección entre política y criptomonedas.