Esta semana, el precio de Bitcoin bajó a los 105.000 USD, pero la criptomoneda dio otro paso hacia la hegemonía como reserva de valor. Según los datos del analista de River, Chris Lee, los Estados Unidos ya cuentan con 49,6 millones de poseedores de Bitcoin, con un valor promedio de 11.000 USD por persona. En comparación, solo 36,7 millones de estadounidenses poseen oro, con un promedio de 1.512 USD por individuo.
Este escenario revela un cambio generacional en el concepto de patrimonio seguro. La generación Z lidera esta transformación al ver a Bitcoin como «oro digital», prefiriendo activos digitales a metales tradicionales. Además, las empresas en EE. UU. siguen la misma dirección. Aproximadamente el 94,8% de los BTC detenidos por compañías cotizadas están en EE. UU., lo que refuerza el papel estratégico de la criptomoneda.
Desde que China prohibió la minería en 2021, EE. UU. asumió el protagonismo del sector. Hoy en día, los mineros estadounidenses producen el 38% de todos los nuevos Bitcoins, consolidando al país como el epicentro del poder computacional global. Factores como la energía barata, el apoyo legislativo y la infraestructura tecnológica han contribuido a este dominio.
Además, Bitcoin ha ganado espacio político en Washington. Según River, el 59% de los senadores y el 66% de los congresistas federales ya apoyan la adopción de la criptomoneda. Algunos estados permiten transacciones con Bitcoin y están evaluando convertirlo en activo de reserva legal, lo que crea un ambiente fértil para su expansión. La Casa Blanca también ha señalado apoyo estratégico, impulsando el sector en suelo estadounidense.
- Lee también: Bitcoin podría llegar a 115.000 USD en julio: Descubre las 3 mejores criptomonedas para aprovechar la subida
Precio y hold de Bitcoin avanzan, pero el oro mantiene relevancia
A pesar del ascenso de Bitcoin, el oro aún mantiene su valor histórico. El metal sigue atrayendo a inversores más conservadores y se mantiene como pilar de las reservas institucionales. Algunos estados de EE. UU. continúan invirtiendo en oro, lo que demuestra que ambos activos pueden coexistir.
Además, la producción de oro en EE. UU. ha disminuido de 237 toneladas en 2017 a 160 toneladas en 2024, lo que limita su crecimiento frente a Bitcoin. Aun así, su papel como refugio seguro sigue vigente en tiempos de incertidumbre económica.
La creciente preferencia de los estadounidenses por Bitcoin marca el comienzo de una nueva era financiera. Según el informe de River, Bitcoin ya no es una promesa lejana; ya está moldeando decisiones de inversión, regulaciones y estrategias de reserva de valor. Para los inversores, la elección entre oro y Bitcoin depende del perfil de riesgo: estabilidad en el primero, potencial de valorización en el segundo.