El Senado de los Estados Unidos tiene programada para este martes, 17 de junio, la votación de la Ley GENIUS, una propuesta que podría cambiar drásticamente el mercado de las stablecoins en el país. Según el proyecto, la propuesta establece reglas estrictas para el sector. De ser aprobada, las stablecoins deberán estar respaldadas al 100% por dólares o activos altamente líquidos, y se exigirá auditorías anuales para las empresas cuyo valor supere los 50 mil millones de dólares.
Si es aprobada, la ley será enviada directamente a la Cámara de Representantes, donde deberá someterse a un nuevo debate y votación. En caso de avanzar, el presidente Donald Trump espera sancionar la ley antes de agosto, estableciendo un marco regulatorio sin precedentes para los activos digitales en EE. UU.
Según el secretario del Tesoro, Scott Bessent, una regulación robusta para las stablecoins podría impulsar significativamente el sector. Estima que el mercado de estas monedas podría superar los 2 billones de dólares (aproximadamente 1,8 billones de euros) para 2028, consolidando la supremacía del dólar en el sistema financiero global.
Además, el gobierno cree que la Ley GENIUS también podría mejorar considerablemente la infraestructura de pagos.
«Estamos hablando de un impacto profundo en la economía de EE. UU.», afirmó Bo Hines, líder del Consejo Asesor del Presidente sobre Activos Digitales.
Según él, el proyecto fortalece al dólar, brinda seguridad jurídica a los emisores y prepara al país para una nueva era en el sistema financiero digital.
Cámara de EE.UU debate proyecto alternativo
Mientras el Senado debate la Ley GENIUS, la Cámara de Representantes trabaja en su propia propuesta, conocida como la Ley STABLE. Este texto, aprobado para su discusión en comisión desde abril, presenta diferencias, especialmente sobre cómo regular a los emisores internacionales y el papel de los estados frente al gobierno federal.
Por lo tanto, aunque el Senado apruebe el proyecto mañana, un acuerdo entre ambas cámaras será imprescindible para consolidar una legislación unificada.
Si esto sucede, Estados Unidos dará un paso decisivo en la regulación de las stablecoins, lo que afectará directamente a gigantes como Tether y Circle, y también influirá en todo el ecosistema global de criptoactivos.
Donald Trump ya ha dejado claro que desea tener la nueva ley en su mesa antes de agosto, lo que subraya la prioridad de la regulación para la Casa Blanca.