El presidente Donald Trump ha decidido apostar por la tecnología blockchain para transformar el sistema de ayuda internacional de Estados Unidos. Según una propuesta en estudio en el Departamento de Estado, su equipo sugiere utilizar esta tecnología para rastrear las donaciones enviadas al extranjero con mayor seguridad y transparencia.
De acuerdo con un documento obtenido por el portal Politico, la propuesta también contempla una reforma completa de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). La idea es convertirla en la “Agencia de Asistencia Humanitaria Internacional de EE.UU.” y ponerla bajo el control directo del Secretario de Estado.
Uno de los ejes centrales del plan se encuentra en la sección de “adquisiciones modernizadas basadas en desempeño”, donde se plantea el uso de blockchain para monitorear en tiempo real la distribución de los fondos. El objetivo sería “aumentar radicalmente la seguridad, la trazabilidad y la rendición de cuentas” en el uso de recursos públicos.
«Queremos más resultados reales y menos burocracia y despilfarro», habría declarado un asesor cercano al exmandatario. La propuesta señala que los nuevos criterios exigirían indicadores de impacto proporcionados por terceros, eliminando los informes de autoevaluación que, en muchos casos, encubren fallos en la gestión de los fondos.
La adopción de blockchain en EE.UU.
El momento en el que surge esta propuesta no es casualidad. Desde enero, USAID enfrenta un futuro incierto, con empleados en licencia administrativa y pagos a organizaciones internacionales suspendidos. La situación ha derivado en demandas judiciales y recientemente un juez federal emitió una orden para impedir el cierre total de la agencia.
Al mismo tiempo, el plan de Trump busca reducir el alcance de la ayuda internacional estadounidense, centrándose en áreas como la seguridad global, el desarrollo económico y el fortalecimiento institucional. Estas medidas estarían alineadas con su promesa de convertir a EE.UU. en “la capital mundial de las criptomonedas”, como afirmó en su discurso reciente en la Digital Asset Summit en Nueva York.
«La era del despilfarro ha terminado. Usaremos tecnología para ayudar a quienes lo necesitan, pero con responsabilidad», reiteró Trump en una de sus intervenciones durante el evento.
A pesar de la ambición de la propuesta, cambios estructurales de esta magnitud requieren la aprobación del Congreso. Sin embargo, el documento sugiere que algunas reformas podrían implementarse mediante acción ejecutiva, sin necesidad de pasar por los legisladores.
Expertos recuerdan que el uso de blockchain en donaciones humanitarias no es una idea nueva. Investigaciones académicas y reportes de ONG han demostrado que la tecnología puede reducir la corrupción y mejorar la transparencia en regiones vulnerables. Si la iniciativa avanza, EE.UU. podría posicionarse como líder en este modelo de financiamiento global.