El congresista Gerald E. Connolly, miembro senior del Comité de Supervisión y Reforma Gubernamental de la Cámara de Representantes de los EE. UU., pidió que el Departamento del Tesoro abandone los planes de crear una reserva estratégica de criptomonedas.
Según informes, en una carta dirigida al Secretario del Tesoro, Scott Bessent, Connolly criticó las órdenes ejecutivas firmadas por Donald Trump, alegando que el proyecto solo beneficiaría al expresidente y sus aliados.
“Una reserva como esta no trae ningún beneficio al pueblo estadounidense, pero enriquece a Trump y a sus donantes”, declaró Connolly.
El congresista también señaló que la iniciativa comprometería la política fiscal, favoreciendo determinadas criptomonedas sin justificación económica. Según un funcionario de la Reserva Federal, esta estrategia sería “la idea más absurda de todos los tiempos”.
De acuerdo con la carta, Connolly exigió que el Departamento del Tesoro de EE. UU. detuviera inmediatamente cualquier intento de crear esta reserva. Además, el parlamentario indicó que el gobierno no consultó al Congreso sobre la medida y cuestionó su legalidad. Para él, la decisión de Trump representa un grave abuso del poder ejecutivo.
Reserva de Bitcoin
La orden firmada por Trump establece la Reserva Estratégica de Bitcoin y un «Inventario de Activos Digitales», con el objetivo de convertir a los Estados Unidos en un líder global en criptomonedas. En una publicación en Truth Social, Trump reveló que el plan incluye Bitcoin (BTC), Ethereum (ETH), XRP, Solana (SOL) y Cardano (ADA).
El congresista también alertó sobre los intereses financieros de Trump en el sector. El expresidente tiene una participación significativa en World Liberty Financial, una empresa de criptomonedas que busca operar como un banco digital. Además, Trump está involucrado en el TRUMP Memecoin, un activo que ya ha generado alrededor de 100 millones de dólares en comisiones por transacciones.
“La creación de esta reserva estratégica de criptomonedas favorecerá a Trump y sus aliados a costa de los contribuyentes estadounidenses”, concluyó Connolly. Exigió que el Departamento del Tesoro aclare el proyecto al Comité de Supervisión y proporcione una respuesta formal antes del 27 de marzo.
