El reciente atentado contra el senador colombiano Miguel Uribe ha sido aprovechado por estafadores digitales para promover una campaña fraudulenta vinculada a criptomonedas. Usando una imitación del sitio web de El Tiempo, uno de los diarios más reconocidos del país, los delincuentes crearon una noticia falsa con el objetivo de atraer víctimas hacia la plataforma conocida como Walletix Ecológico.
La estafa se ha viralizado a través de la red social X (antes Twitter), especialmente en publicaciones que simulan una entrevista entre el periodista Luis Carlos Vélez y el propio senador. En el contenido ficticio, se afirma que Uribe habría revelado accidentalmente un “secreto financiero” relacionado con inversiones en criptomonedas durante una transmisión en vivo.
Aunque el medio citado ha desmentido públicamente la publicación, las imágenes siguen circulando. Este tipo de fraude, además de suplantar la identidad del político y del medio de comunicación, se aprovecha del impacto emocional generado por el ataque que sufrió Uribe, para manipular a los usuarios y generar confianza en el esquema.
Un fraude con apariencia de noticia real
A primera vista, el sitio fraudulento presenta un diseño casi idéntico al de El Tiempo. Utiliza el logo original, tipografía similar y un formato que imita artículos de actualidad. Este tipo de montaje busca que los lectores bajen la guardia y acepten como verídica la información presentada.
En el texto manipulado, se asegura que el senador utiliza una plataforma llamada Walletix Ecológico para generar ingresos pasivos con criptomonedas, e incluso se invita al lector a seguir un enlace para “aprovechar la oportunidad”. El link redirige a un formulario de registro que solicita información personal y datos bancarios, un patrón común en este tipo de fraudes.
Expertos en ciberseguridad advierten que este tipo de técnicas de ingeniería social se vuelven más efectivas cuando están relacionadas con eventos noticiosos recientes o figuras públicas reconocidas. En estos casos, la inmediatez del tema y el uso de símbolos confiables —como el nombre de un medio legítimo— aumentan el nivel de persuasión.