Bitcoin cayó a USD 84.900 en la tarde de este lunes (1º) después de retroceder un 7% en las últimas 24 horas, intensificando la presión sobre el mercado de criptomonedas en la primera sesión del mes. La capitalización total del sector también registró una fuerte caída, con un retroceso del 7,2% hasta USD 2,98 billones.
Las altcoins acompañaron el movimiento bajista del Bitcoin. Ethereum, por ejemplo, retrocedió más del 9% hasta USD 2.743. Por su parte, XRP se desvalorizó un 9,24% hasta USD 1,99. Solana, Dogecoin, Cardano y otras altcoins importantes también registraron caídas de dos dígitos.
El movimiento coincide con la repercusión de declaraciones del CEO de Strategy, Phong Le, quien mencionó la posibilidad de vender Bitcoin para financiar el pago de dividendos de las acciones preferentes de la empresa. La señal generó preocupación por una oferta adicional en el mercado y pudo haber contribuido a un retroceso más acentuado.
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Repetición de caídas al inicio del mes
El analista Michael Van de Poppe destacó que la corrección actual mantiene un patrón observado en los últimos meses. Recordó que el primer día de negociación de noviembre también registró liquidaciones expresivas, especialmente entre altcoins, y evaluó que el comportamiento puede reflejar ciclos de reequilibrio de grandes inversores institucionales.
Según Van de Poppe, movimientos de esta naturaleza suelen ocurrir al inicio de cada mes y tienden a disiparse tras uno o dos días, período en el que los mercados normalmente recuperan estabilidad.
Capitulación como parte de ciclos históricos
El analista observó además qué episodios de fuerte presión vendedora forman parte de las etapas que preceden a la reanudación de un ciclo. En sus análisis, Van de Poppe mencionó que fases de capitulación en Bitcoin y en altcoins son comunes antes de movimientos más amplios de recuperación.
El analista clasificó la sesión actual como un ejemplo más de este tipo de dinámica, marcada por la búsqueda de liquidez en niveles más bajos.
Sin embargo, la declaración del CEO de Strategy añadió un componente adicional de incertidumbre. Como la empresa mantiene una de las mayores posiciones corporativas en Bitcoin, cualquier posibilidad de venta es monitoreada por el mercado cripto. La señal de que parte de los activos puede usarse para el pago de dividendos aumentó la cautela entre inversores de corto plazo.




