El Banco Industrial, la entidad financiera más grande de Guatemala, anunció que incorporará las stablecoins para permitir a los ciudadanos recibir remesas desde Estados Unidos de manera más económica, fácil y accesible.
La adopción se llevará a cabo mediante la integración del banco con SukuPay, una compañía fintech que se dedica a modernizar los pagos transfronterizos con tecnología Blockchain.
Guatemala digitaliza sus pagos y remesas
La alianza con SukuPay permitirá a los guatemaltecos recibir dinero desde Estados Unidos por USD0,99 utilizando solo su número de teléfono dentro de la aplicación móvil Zigi, propia del Banco Industrial. Esto eximirá a los usuarios de cualquier otra billetera cripto.
Por otro lado, la adopción de stablecoins ofrecerían practicidad, flexibilidad y bajo coste para las transacciones con remesas. Estas operaciones generan el 20% del Producto Bruto Interno (PBI) de Guatemala, en un valor nominal de USD 21000 millones por este concepto.
La solución utilizará USDC sobre la red Polygon un protocolo Capa 2 de Ethereum, lo que permite agilizar las transacciones internacionales.
«Con la infraestructura de SukuPay integrada directamente en Zigi, no solo estamos mejorando las remesas, estamos estableciendo un nuevo estándar», dijo el Jefe de la División de Alianzas Estratégicas del Banco Industrial, Michel Caputi. «Esta es una solución moderna para un problema heredado, y estamos orgullosos de liderar el camino América Latina«, agregó.
Inclusión financiera con stablecoins
El papel de las monedas estables es particularmente disruptivo en pagos, ahorro y remesas, sobre todo en países en desarrollo donde los sistemas bancarios son limitados o las monedas locales presentan volatilidad significativa.
Según datos Findex del Banco Mundial, solo un 35% de los adultos activos guatemaltecos acceden a una banca formal. Esta baja bancarización amplifica los desafíos para recibir remesas de manera rápida y segura, por lo cual herramientas como la ofrecida por SukuPay y Banco Industrial ayudan a tender puentes hacia la inclusión financiera.
Al reducir los requisitos tecnológicos y burocráticos, iniciativas como esta permiten que un mayor segmento de la población acceda a fondos provenientes de familiares en el exterior, contribuyendo así a la movilidad social y estabilidad financiera del país.