Una operación internacional coordinada por INTERPOL y AFRIPOL resultó en 83 arrestos y la identificación de 160 personas de interés en seis países africanos, entre julio y septiembre de 2025. La operación, denominada Catalyst, se centró en interrumpir flujos financieros y esquemas vinculados al financiamiento del terrorismo, abarcando delitos como fraudes, lavado de dinero con criptomonedas y estafas cibernéticas.
Según las autoridades, la acción rastreó a más de 15.000 personas y entidades. Además, reveló cerca de US$ 260 millones en monedas fiduciarias y virtuales potencialmente relacionadas con actividades terroristas. Durante las investigaciones, los agentes incautaron aproximadamente US$ 600.000, y continúan en curso para recuperar más activos.
Entre los detenidos, 21 enfrentarán cargos por delitos directamente relacionados con el terrorismo. Otros 28 responderán por fraude y lavado de dinero, 16 por estafas cibernéticas y 18 por uso ilegal de criptomonedas.
Esquemas financieros y uso de criptomonedas bajo vigilancia
El combate al financiamiento del terrorismo representa un desafío creciente para las fuerzas de seguridad, ya que involucra actividades criminales diversas: desde secuestros y fraudes hasta el uso indebido de criptomonedas y sistemas informales de transferencia de valores.
Para enfrentar esta complejidad, las agencias policiales participantes compartieron datos estratégicos y contaron con la colaboración de empresas privadas como Binance, Moody’s y Uppsala Security, que ayudaron en el rastreo de transacciones con criptomonedas.
El secretario general de INTERPOL, Valdecy Urquiza, destacó que la operación fue la primera en integrar unidades de combate a delitos financieros, cibernéticos y terroristas de múltiples países africanos bajo coordinación conjunta de INTERPOL y AFRIPOL.
Por su parte, el embajador Jalel Chelba, director ejecutivo de AFRIPOL, resaltó que la operación evidencia la importancia de la cooperación regional para enfrentar amenazas transnacionales a la seguridad.
Casos en Angola, Kenia y Nigeria muestran diversidad de esquemas
En Angola, los agentes arrestaron a 25 personas de diferentes nacionalidades. Las detenciones se produjeron tras identificar sistemas informales de transferencia de valores asociados con lavado de dinero y posible financiamiento de grupos terroristas. Además, las autoridades incautaron US$ 588.000, 100 celulares, 40 computadoras y congelaron 60 cuentas bancarias.
En Kenia, las autoridades investigan un esquema de lavado de dinero con criptomonedas, valorado en aproximadamente US$ 430.000, que involucra a 12 personas —dos de ellas ya detenidas. En otro caso, dos sospechosos fueron arrestados por reclutamiento en línea de jóvenes para grupos extremistas, con fondos rastreados hasta contactos en Tanzania.
En Nigeria, la operación llevó a la detención de 11 sospechosos de terrorismo, incluyendo miembros de alto rango de grupos extremistas activos en la región.
Otro caso destacado involucra un esquema Ponzi internacional basado en criptomonedas, con víctimas en 17 países, incluyendo Camerún, Kenia y Nigeria. El fraude afectó a más de 100.000 personas y causó pérdidas estimadas en US$ 562 millones. Las investigaciones indican que parte de las billeteras digitales asociadas al esquema podría tener conexiones con financiamiento del terrorismo.
Además, INTERPOL emitió una Alerta Roja contra el supuesto líder de un fraude de US$ 5 millones en criptomonedas, cuyos fondos se movieron entre distintas plataformas para ocultar su origen. Las autoridades consideran este caso representativo de las nuevas metodologías financieras usadas para sostener actividades terroristas.


