Kazajistán anunció el lanzamiento de su primera moneda estable nacional, Evo, emitida por entidades privadas y bajo supervisión del Banco Nacional de Kazajistán.
El proyecto, desarrollado en el país de Asia Central, tiene como objetivo combinar la innovación digital en criptomonedas con los sistemas financieros tradicionales.
La iniciativa fue desarrollada por la casa de cambio Intebix, registrada en el Centro Financiero Internacional de Astana (AIFC), un hub financiero independiente en Kazajistán. Esto, en conjunto con Solana, el sistema de pagos Mastercard y el Banco Euroasiático.
Según un comunicado del Banco Nacional de Kazajistán, esta alianza permitirá a los usuarios convertir criptomonedas en stablecoins denominadas en tenge —la moneda oficial del país— y realizar pagos comerciales con tarjetas asociadas.
En búsqueda de su propio ecosistema cripto
El gobernador del Banco, Timur Suleimenov, destacó que esta nueva moneda estable nacional se enmarca en una estrategia más amplia destinada a construir un ecosistema nacional de activos digitales, impulsando tanto el desarrollo de herramientas innovadoras como la consolidación de un mercado de activos digitales en el país.
«El en 2024, el jefe de Estado instruyó aprovechar al máximo el potencial de los productos financieros digitales. Este año, el Banco Nacional lanzó un sandbox regulatorio para criptoactivos y se desarrollaron las modificaciones legislativas correspondientes. Entre los ocho proyectos piloto seleccionados, el primero es la stablecoin nacional», señaló Suleimenov.
Cabe recordar que en junio de 2025 el Banco Nacional presentó una tarjeta lanzada previamente que permite pagar bienes y servicios con criptomonedas, convirtiéndolas instantáneamente a tenge.
Por su parte, el responsable de stablecoin en Solana, Tamar Menteshashvili, destacó en su cuenta de X el orgullo de respaldar esta iniciativa junto a los socios involucrados y resaltó que el proyecto ayuda a definir el futuro de las finanzas digitales en la región.
El proyecto impulsado por el país de Asia Central está enmarcado en una tendencia global, en donde los Bancos Centrales ponen en marcha iniciativas relacionadas con los activos digitales. Un caso relevante es el de Bahamas, donde el Sand Dollar mantiene paralelismo con el dólar bahameño y busca ofrecer pagos más inclusivos y seguros en todo el país.
No obstante, la diferencia entre Evo y Sand Dollar es que esta última es una CBDC, creada netamente por el Banco Central. En el caso de Evo, al estar bajo supervisión por dicha entidad, permite interactuar con el ecosistema de los criptoactivos.