La Justicia de Estados Unidos suspendió por 60 días un proceso judicial impulsado por fiscales generales de 18 estados contra la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés). La demanda, presentada en noviembre de 2024, cuestionaba el enfoque agresivo del regulador hacia empresas del sector de las criptomonedas.
En términos generales, la coalición de fiscales acusaba a la SEC de exceder sus facultades legales. Durante el período en cuestión, la agencia estaba bajo el mando de Gary Gensler, quien fue criticado por impulsar una especie de «caza de brujas» contra empresas y actores del ecosistema cripto.
Acusaciones de extralimitación por parte de la SEC
Según la denuncia, la SEC habría violado la Constitución y el papel del Congreso al intentar legislar de facto sobre el mercado cripto. Bajo el principio de separación de poderes, solo el Congreso tiene autoridad para crear leyes y definir qué está permitido o no dentro del marco legal.
El conflicto gira en torno a si las exchanges y otras compañías del sector deben ser consideradas como intermediarios financieros tradicionales, como corredores de bolsa. Para la SEC, el hecho de que estas empresas negocien tokens con valor de mercado implica que actúan como tales y, por lo tanto, deberían estar registradas y autorizadas bajo sus reglas.
Sin embargo, los fiscales argumentan que la agencia está intentando crear una “nueva ley” sin el respaldo legislativo necesario. Señalan que ninguna norma vigente en Estados Unidos le otorga a la SEC autoridad explícita para regular el sector cripto de esta forma.
Por ello, liderados por el fiscal general del estado de Kentucky, solicitaron a la Justicia que impida a la SEC presentar demandas contra estas empresas por presunta violación de la ley de valores.
«La SEC intentó apropiarse unilateralmente de la autoridad reguladora de los estados», señala uno de los fragmentos de la denuncia.
Nuevo contexto político y señales de cambio
La decisión del juez Gregory Van Tatenhove, del Distrito Este de Kentucky, fue publicada el miércoles 16 y refleja un cambio de escenario desde que Donald Trump asumió nuevamente la presidencia. Bajo la dirección interina de Mark Uyeda, la SEC ha dado señales claras de moderación.
Una de las más evidentes fue la designación de Paul Atkins, defensor de la autorregulación de los mercados, para un cargo clave dentro del organismo. Además, la SEC ha comenzado a retirar algunas de sus demandas más polémicas, como las dirigidas contra Kraken y Uniswap Labs, reduciendo la presión sobre la industria.
La suspensión temporal otorga a ambas partes 30 días para presentar argumentos finales. Todo indica que el caso podría resolverse mediante un acuerdo, especialmente considerando que la SEC ya ha creado un grupo de trabajo para revisar la normativa del sector.
Mientras tanto, el mensaje del Poder Judicial fue contundente: la SEC no puede actuar como un “súper Congreso”. Y, al parecer, la nueva dirección de la agencia está comenzando a tomar nota.
