El escenario político en Washington ha tomado nuevos giros con la audiencia de Paul Atkins, nominado para presidir la Comisión de Valores de los Estados Unidos (SEC). Durante la audiencia, celebrada el 27 de marzo, los senadores cuestionaron los vínculos de Atkins con el sector de las criptomonedas y plantearon dudas sobre su imparcialidad.
Atkins dirigió Patomak Global Partners, una consultora que prestó servicios a la exchange de criptomonedas FTX antes de su colapso en 2022. La senadora Elizabeth Warren, de Massachusetts, fue una de las más críticas. Según Warren, la relación de Atkins con la empresa representa un posible conflicto de interés grave.
Warren afirmó que Patomak cobra más de 1.200 dólares por hora por sus servicios y advirtió que, si Atkins asume la presidencia de la SEC, podría favorecer a antiguos clientes de la firma.
“Esos clientes pagaron millones y ahora podrían tener un aliado en la presidencia de la SEC”, dijo la senadora.
Ante la presión, Atkins afirmó que tiene la intención de vender su empresa en caso de ser confirmado en el cargo. Sin embargo, evitó mencionar quiénes serían los compradores interesados, lo que avivó aún más las críticas. Warren sugirió que la venta de Patomak podría funcionar como un “pre-soborno” para influir en decisiones futuras.
Nuevos desarrollos del caso FTX
A pesar de las dudas planteadas por los demócratas, senadores republicanos mostraron un firme apoyo a Atkins. El senador Tim Scott, por ejemplo, elogió al nominado y declaró que aportaría “la claridad tan esperada” para el sector de los criptoactivos.
Atkins también señaló que busca adoptar un enfoque más flexible con el mercado digital. En una declaración oficial, dijo que trabajará para crear “una base regulatoria sólida” para los activos digitales, con un enfoque en principios y coherencia.
La nominación de Atkins aún está a la espera de la votación en el Comité Bancario del Senado. Mientras tanto, el sector de las criptomonedas observa de cerca los desarrollos. Ejecutivos del sector han mostrado apoyo a la nominación desde que Donald Trump anunció su elección en diciembre.
La SEC ya ha dado señales de cambio desde la llegada de Mark Uyeda como presidente interino. Bajo su gestión, la comisión suspendió investigaciones contra gigantes como Coinbase y Ripple, empresas que, incluso, financian a candidatos en las elecciones de 2024.
Además de su vinculación con FTX, Atkins posee participaciones millonarias en empresas como Securitize, Pontoro y la propia Patomak, lo que refuerza el debate sobre la transparencia y los conflictos éticos. Así, si es aprobado, tendrá que enfrentar estos temas de manera directa al inicio de su mandato.
