A pesar de que el 96% de la población mexicana ha escuchado sobre criptomonedas, solo el 47% afirma entender realmente su funcionamiento. Este dato proviene de un reciente estudio realizado por Consensys en colaboración con YouGov, que refleja el panorama actual de las criptomonedas en México.
De acuerdo con Daniel Lynch, director senior de Ventas Estratégicas de Consensys, el porcentaje de mexicanos que comprende el concepto de criptomonedas es inferior al promedio de otros países latinoamericanos. Lynch señala que esto se debe, en parte, a la falta de aplicaciones prácticas y relevantes de estas tecnologías en el país.
En países como Argentina, donde la inestabilidad económica ha impulsado el uso de bitcoin como reserva de valor, las criptomonedas tienen una función más inmediata. En contraste, México cuenta con un alto porcentaje de la población bancarizada, pero sigue existiendo una percepción de que el sistema financiero tradicional podría mejorarse considerablemente.
El estudio también revela que un 38% de los mexicanos asocia las criptomonedas con el futuro del dinero, aunque esta visión ha disminuido en comparación con años anteriores. Lynch sugiere que esta disminución está relacionada con la falta de productos que impacten directamente la vida diaria de los usuarios.
Un ejemplo claro de su potencial de uso es en el envío de remesas. Actualmente, los mexicanos pagan comisiones de alrededor del 7% al enviar dinero desde Estados Unidos. Sin embargo, mediante el uso de soluciones basadas en blockchain, como las tarjetas de débito vinculadas a criptomonedas, estas comisiones podrían reducirse a fracciones de centavo. Además, los destinatarios podrían depositar estos fondos en protocolos financieros descentralizados (DeFi) para generar intereses.
Las principales barreras para la adopción de criptomonedas, según el informe, son las estafas (53%), la volatilidad del mercado (50%) y la falta de orientación sobre cómo empezar (46%). Estos factores no son exclusivos de México, pero su impacto es significativo en la percepción pública.
Lynch sugiere que la industria debe centrarse en casos de uso más accesibles que no generen miedo, como redes sociales descentralizadas, juegos basados en blockchain y plataformas de contenido. Estas opciones permitirían atraer a usuarios sin que necesiten realizar grandes inversiones ni enfrentar riesgos financieros considerables.
Además del crecimiento de criptomonedas como bitcoin y ethereum, ha aumentado el interés en monedas enfocadas en la privacidad, como Monero. Andrés Fernández, miembro de la comunidad de Monero, destaca que esta moneda se considera «el equivalente digital al efectivo en términos de privacidad», ya que las transacciones realizadas con Monero ocultan información sobre el remitente, el receptor y el monto.
No obstante, la adopción de Monero enfrenta obstáculos significativos, como la falta de conocimiento y las restricciones impuestas por gobiernos y plataformas de intercambio. Fernández agrega que, a pesar de las dificultades para adquirir Monero en plataformas tradicionales, su resistencia a la censura garantiza su relevancia a largo plazo.
Según el estudio de Consensys, casi la mitad de los mexicanos (49%) planea invertir en criptomonedas en los próximos 12 meses, lo que sugiere que, a pesar de las barreras, el interés por este tipo de activos sigue aumentando.
Como concluye Lynch, “la evolución de las criptomonedas no solo busca transformar el sistema financiero, sino ofrecer herramientas reales que mejoren la vida cotidiana de las personas”.
Este sitio web utiliza cookies.